Me suscribí a Netflix al poco tiempo de su estreno en España, y he estado pagando el acceso a la plataforma todos los meses desde hace casi ya 6 años sin faltar ni un solo mes. Se podría decir que he sido un usuario fiel cuanto menos.
Pero las cosas han cambiado muchísimo desde entonces, y cada vez me “picaban” más esos 18 euros que desaparecían de mi cuenta a principios de mes, y al final ha terminado ocurriendo lo inevitable. Me he dado de baja.
Hasta hace una semana estaba suscrito a más servicios de streaming de los que yo mismo estaba dispuesto a admitir: Netflix, YouTube Premium, Crunchyroll, Disney+, y por supuesto Prime Video (esa casi no cuenta porque se compensa con los envíos gratuitos de Amazon Prime, pero ahí está chupando del bote como el resto).
Llegado el momento de sacar la tijera lo primero que hice fue darme de baja de Crunchyroll, al fin y al cabo, ya había terminado la primera temporada de Chainsaw Man, y la frustración generada por el bajo rendimiento de la app para Smart TV lo convertía en un claro candidato a desaparecer de mi lista de gastos mensuales.
Goodbye, Netflix. Fue bonito mientras duró
El siguiente en caer ha sido Netflix. Solo con lo que pagaba todos los meses casi podía cubrir la suma total del gasto en el resto de plataformas. No ha sido una decisión guiada exclusivamente por un tema monetario, aunque la subida desde los 11,99€ que pagaba al principio a los 17,99€ que me costaba el servicio actualmente es una losa que no se puede pasar por alto así como así (tengamos en cuenta que supone un incremento del 50% sobre su precio inicial).
Hasta ahora lo pagaba gustosamente porque podía compartir la cuenta con mis padres y mi hermana, pero dentro de poco parece que eso tampoco va a ser posible sin pagar un extra (que en mi caso sería de unos 6 euros, lo que haría un total de unos 24 eurazos al mes).
¿Está explotando la burbuja del streaming? Yo lo único que tengo claro a estas alturas es que el contenido cada vez está más disperso, y los tiempos en los que podías ver casi todo desde una única plataforma a día de hoy no es más que el recuerdo de tiempos cada vez más lejanos.
Netflix ha intentado contrarrestar esta dispersión de contenidos creando muchas (muchísimas) series y películas de producción propia, pero para algunos de nosotros eso no es suficiente. Algunas series se cancelan a los pocos días de su estreno, y muchas de las que se quedan tampoco es que sean para echar cohetes.
Colega, ¿Dónde está mi contenido?
No nos engañemos. Netflix tiene mucho contenido de calidad, muchísimo. Pero es un contenido que se ve sepultado por las tendencias del momento, que en muchos casos apenas rozan el aprobado.
El fondo de armario que tiene el gigante del streaming sigue siendo abrumador, ahí tenemos joyas como Barton Fink, El Gran Lebowski, En el Nombre del Padre, o El Precio del Poder (que, por cierto, no podrás ver si solo estás suscrito al nuevo plan con anuncios de Netflix).
Pero por cada Barton Fink -o Love Death & Robots, por poner un ejemplo más reciente- tienes 10 películas y series originales que no son más que un cascarón vacío con un nivel de producción altísimo, eso sí.
Tengo que admitir que últimamente he disfrutado de series como Machos Alfa y El Gabinete de Curiosidades de Guillermo del Toro, y la verdad es que la última temporada de Stranger Things tampoco estaba tan mal. Lamentablemente eso no es suficiente para compensar la subida de precios de los últimos años, el fin de las cuentas compartidas y un catálogo repleto espinas.
No descarto volver algún día a Netflix si las cosas mejoran, pero la tendencia actual y la fuerte competencia de otras plataformas no parecen apuntar a que eso vaya a ocurrir en un corto periodo de tiempo.
Me parece razonable y lógico lo que dice ya que hay momentos donde uno debe estar buscando tendencias, películas, series y cortos que lo animen a uno a seguir pero la realidad que hay momentos donde ya no hay algo que te motive a continuar con ellos, fuera que en los últimos meses han cancelado muchas series buenas como caso 81, incógnito, pose y otras que hacen perder la emoción
Pero y porque te a subido de 13 a 18?
La verdad en un comienzo se podía compartir a varias personas, yo empecé así, cuando me suscribí todavía se podía pero para mí lo peor es que me hartan las series yo quiero ver películas de todos los tiempos y repetirlas cosa que ya no se puede xq priorizan las series..