Los móviles con pantallas que incorporan una tasa de refresco de 90Hz e incluso 120Hz son cada vez más habituales. Los fabricantes de telefonía móvil siempre están buscando diferenciarse de la competencia, y últimamente esta es una de las características que más a menudo suele salir a la palestra. La pregunta aquí sería si este es un factor determinante a la hora de cambiar de móvil, pero ese es un debate que dejaremos para otra ocasión.
¿Qué es la tasa de refresco exactamente?
Lo que la gente no tiene tan claro sin embargo es el significado del término “tasa de refresco”. Más o menos podemos hacernos a la idea de que es algo relacionado con la pantalla del terminal, aunque sus efectos tanto a nivel de rendimiento como de batería son mucho más extensos.
Básicamente, la tasa de refresco es la medida utilizada para calcular lo rápido que se actualiza una pantalla. O dicho de otra manera, la frecuencia y velocidad con la que se refresca el contenido que se muestra ante nuestros ojos. Este es un valor que se mide en hercios (Hz) y expresa el número de veces que se actualiza una pantalla cada segundo que pasa. Así, un panel de 60Hz actualiza su contenido 60 veces por segundo, un panel de 90Hz hace lo propio 90 veces cada segundo, y lo mismo ocurre si tenemos un panel de 120Hz: correcto, que la pantalla se refresca 120 veces cada segundo.
Puedes hacerte una idea práctica de la enorme diferencia que significa tener una menor o mayor tasa de refresco echando un vistazo a este test de movimiento. Ciertamente revelador.
¿Cuál es la diferencia entre tener un móvil con una tasa de refresco de 60Hz, 90Hz o 120Hz?
A efectos prácticos queda claro que una mayor tasa de refresco hará que tanto el sistema como los videos, las aplicaciones y los juegos se vean mucho más ágiles, naturales y fluidos.
Sin embargo, no todo son ventajas ya que la batería en tasas de 90 y 120 hercios se consume a mucha más velocidad impidiendo en la mayoría de casos aguantar un día entero sin tener que enchufar el móvil al cargador. Por otro lado, las tasas de refresco elevadas incrementan notablemente el trabajo del procesador, poniéndolo al límite cuando además de una alta tasa de refresco estamos ejecutando alguna aplicación pesada como puede ser un videojuego con mucha carga gráfica o un programa de edición.
Además, cabe destacar que la mayoría de aplicaciones como el correo, Facebook o YouTube no se benefician demasiado de una alta tasa de refresco, ya que están diseñadas para funcionar en el estándar de 60Hz. Para que nos hagamos una idea, la mayoría de videos se reproducen en el estándar de 24 fotogramas por segundo, o lo que es lo mismo, 24 hercios, por lo que cualquier medida por encima de esa cifra no aporta ningún beneficio real. Donde sí notaremos diferencia es a la hora de jugar a videojuegos en el móvil, donde notaremos menos lag o retardo, especialmente en géneros como los shooters, los juegos de carreras y todos aquellos títulos que se muevan a cierta velocidad.
Cómo calcular en tiempo real la tasa de refresco de la pantalla de un dispositivo Android
Dicho todo esto, y en cualquier caso, también debemos saber que en la mayoría de teléfonos móviles (especialmente en los de gama alta), la tasa de refresco suele ser adaptativa. Es decir, que las pantallas no siempre están mostrando la tasa de refresco máxima, sino que se acomodan según las necesidades de cada momento. Una técnica más que necesaria dado el alto consumo de autonomía que implican este tipo de paneles.
Si estamos interesados en comprobar en vivo la tasa de refresco que está mostrando la pantalla de nuestro móvil podemos hacerlo con la ayuda de Display Checker. Se trata de una herramienta para Android completamente gratuita, y se puede descargar sin mayores complicaciones desde Google Play Store.
Una vez instalada la aplicación podemos obtener varios datos sobre la pantalla de nuestro dispositivo. Desde la resolución, pasando por la densidad de píxeles, el tamaño de la pantalla y también si soporta la reproducción en HDR. Además de esto, si activamos la pestaña “Show real-time refresh rate” también podremos ver en uno de los márgenes de la pantalla la tasa de refresco de la pantalla en tiempo real, segundo a segundo.
Cuando activamos la monitorización en tiempo real también se añadirá un nuevo botón en la barra de notificaciones del sistema, desde donde podremos activar o desactivar esta función cómodamente siempre que lo necesitemos.