Si tienes una buena conexión a Internet y notas que en un momento dado las páginas web no cargan correctamente o los videos de Netflix, YouTube, etc. se quedan cargando continuamente, una de las primeras cosas que deberías comprobar son el router y el modem. A menos que nuestro proveedor de Internet tenga problemas con la línea, esta es la manera más sencilla de resolver cualquier incidencia de lentitud o cortes en nuestra red casera.
En estos casos lo más recomendable es reiniciar tanto el router como el modem, y si nada de esto da resultado hacer un buen reset. Los routers tienden a ralentizarse con el paso del tiempo, habitualmente debido a un problema de software, y en el caso de los módems, cuando los reiniciamos estos vuelven a conectarse con nuestro proveedor de servicios (ISP), solucionando cualquier fallo temporal que esté bloqueando la recepción de señal en el dispositivo.
Cómo reiniciar un router o un modem paso a paso
A continuación, explicamos paso a paso cómo reiniciar un router correctamente. Si nunca lo has hecho o tienes dudas de cómo realizar el proceso, echa un vistazo a las siguientes indicaciones.
Paso #1: Localiza tu router y tu modem
El modem es el dispositivo que se conecta a la toma telefónica o de fibra óptica de la pared, y es el que se encarga de recibir la señal de Internet. El router por su parte es la pieza de hardware que se encarga de repartir la señal al resto de dispositivos de nuestra red, ya sea por cable (Ethernet) o a través de Wi-Fi.
Dependiendo de la configuración que tengamos en casa, puede que dispongamos de un único dispositivo que hace tanto las labores de router como de modem, o puede que tengamos dos dispositivos independientes el uno del otro (es decir, un modem y un router por separado).
Los routers Wi-Fi suelen tener varias antenas visibles, por lo que son bastante sencillos de identificar. Si tienes dudas, localiza el router y fíjate si está conectado a otro dispositivo. Si está conectado directamente a la toma de la pared eso significa que es una unidad combinada. Por el contrario, si está conectado a otro dispositivo quiere decir que es un router y que la otra pieza de hardware a la que está conectado es el modem.
Nota: Actualmente la mayoría de proveedores ISP reparten dispositivos con doble función (router-modem), así que a menos que hayas comprado un router por separado lo más probable es que tengas un único dispositivo que realiza todo el trabajo.
Paso #2: Apaga el router y el modem
La verdad es que este es un proceso de lo más sencillo que no tiene ningún misterio. Primero perderás la conexión a Internet mientras se reinicia el dispositivo, y después de un par de minutos volverás a recuperarla automáticamente.
Dicho esto, localiza la toma de corriente del router y del modem (o de la unidad combinada, si tienes un único dispositivo). Se trata de un cable con un conector circular ubicado en una de las esquinas de la parte trasera del dispositivo.
Ahora desconecta el cable de corriente y espera durante al menos 10 segundos antes de volverlo a conectar. Si quieres ser lo más cuidadoso posible espera hasta 30 segundos. Esperar un poco permite que los condensadores eléctricos, tanto del router como del modem, se descarguen completamente y olviden cualquier configuración defectuosa. Además, también se corta la conexión con el proveedor de Internet, obligando al dispositivo a establecer de nuevo la conexión.
Paso #3: Conecta de nuevo el modem
A continuación, vuelve a conectar el cable de alimentación. Verás como las luces del modem se vuelven a encender, y el dispositivo intenta reconectarse de nuevo a Internet. Este es un proceso automático que puede durar algunos minutos (no más de 3 o 4 minutos a lo sumo), así que relájate y espera tranquilamente.
Puedes saber cuando ha terminado el reinicio fijándote en las luces que emite el modem. Al principio verás que parpadean y que aparecen colores diferentes a los habituales (algunas luces pueden aparecer de color naranja o rojo durante el reinicio para luego volverse de color verde o amarillo). Sabrás que el reinicio ha finalizado cuando las luces se queden estables y dejen de parpadear.
También verás que cuando recuperas la conexión la luz que aparece bajo el indicador de “Online” está de color verde (dependiendo del modem también puede poner “Internet” o mostrar el dibujo de un planeta).
Paso #4: Conecta el router
Por último, vuelve a conectar el cable de corriente del router. El dispositivo volverá a iniciarse y sus luces se encenderán de nuevo. Automáticamente se intentará conectar al modem y la red Wi-Fi volverá a estar operativa.
El reinicio del router suele ser más rápido, aunque también conviene esperar un par de minutos antes de comprobar que todo va bien. Una vez pasado este tiempo prudencial, intenta conectarte de nuevo a Internet y verifica que las páginas cargan correctamente y que puedes ver videos online sin cortes ni problemas.
Si después de esperar varios minutos las luces del modem siguen parpadeando y no tienes acceso a Internet lo más probable es que el problema esté en el lado del ISP. En tal caso, ponte en contacto con tu operadora para que realicen las comprobaciones necesarias.
Paso #5: Resetea el modem
Si el reinicio no ha funcionado puede que quieras probar alguna cosa más antes de llamar al soporte técnico y pasarte un buen rato al teléfono. Aparte del reinicio también podemos resetear el modem. Este es un proceso más delicado, ya que borra cualquier configuración personalizada que tengamos aplicada en el router (como por ejemplo, el usuario y contraseña de acceso o la configuración de la red wifi en dispositivos híbridos modem-router).
La diferencia entre reiniciar y resetear el router es algo así como el equivalente entre reiniciar o reinstalar Windows por completo en un PC. Es una diferencia importante.
En cualquier caso, si quieres hacer un reset al modem y dejarlo en estado de fábrica tan solo tienes que buscar su correspondiente botón en el dispositivo. Normalmente se encuentra en la parte trasera, y suele estar dentro de un pequeño agujero que únicamente se puede acceder mediante un palillo muy fino, un clip o un alfiler.
Presiona el botón de reset durante 10 segundos y suéltalo: verás como el dispositivo se apaga y se vuelve a encender. El proceso es igual que cuando reiniciamos el router, solo que en esta ocasión lo haremos completamente desde cero, como si fuera el primer día que sacamos el dispositivo de su caja.