Como redactor de una web de tecnología suelo recibir bastantes comunicaciones por email de compañías que quieren promocionar sus productos o difundir notas de prensa. Normalmente no respondo a este tipo de correos, y eso las empresas lo saben.
Por eso, los departamentos de marketing suelen añadir rastreadores o “trackers” a los mails: para confirmar que el destinatario ha recibido el mensaje y no quiere responder, o por el contrario, todavía no ha abierto el email y conviene enviarle un nuevo recordatorio por si acaso.
Es una buena forma de evitar hacer trabajo en balde enviando emails a cuentas inactivas o a gente que no está interesada, pero también sirve para conocer otros datos del destinatario, como por ejemplo, el tipo de dispositivo desde el que se ha leído el correo (móvil o PC), la fecha/hora de apertura y hasta la geolocalización.
Cómo saber si un email tiene un tracker o rastreador incorporado (y cómo bloquearlo)
El ejemplo que os acabo de poner es solo un caso personal, pero hoy en día todo el mundo recibe emails con rastreadores provenientes de tiendas online, de servicios a los que estamos suscritos, de empresas de mensajería y más. Es una práctica que está muy estandarizada y forma parte del día a día en el mundo del marketing.
Si no te gustan este tipo de prácticas (a nadie le gusta que le espíen) puedes utilizar una herramienta como Ugly Email, una extensión bastante práctica para Google Chrome que analiza todos los emails que recibes en Gmail en busca de rastreadores.
Si Ugly Email detecta algún pixel de seguimiento insertado en el correo nos lo notificará mediante un símbolo en la cabecera del email con forma de ojo.
Además de avisarnos de los emails espía también procederá a bloquear los rastreadores en caso de que sea posible. Todo ello de forma automática.
Si tenemos curiosidad por saber qué tecnología han utilizado para rastrearnos, también podemos verlo pasando el ratón por encima del icono del ojo. Ugly Email es capaz de detectar más de 20 servicios de seguimiento, entre los que se encuentran MailChimp, Salesforce, Amazon SES, Sendgrid y otras plataformas de email marketing.
Cuando se trata de herramientas de terceros que interactúan con nuestro email es importante asegurarse de que estamos ante una aplicación que respeta la privacidad y seguridad del usuario. En este caso podemos decir que Ugly Email respeta estos principios, ya que todos los datos se almacenan en el navegador de manera local, y además es de código abierto.